Cuando Neiva Guedes comenzó su tarea de investigación y conservación, eran 1500 ejemplares. Hoy, ya son 5000 solo en el Mato Grosso, de un total de 6.500, si se incluyen los que habitan en las regiones de Pará, Maranhão y Tocantins.
Una bióloga salvó de la extinción al guacamayo azul con nidos artificiales
