El trabajo de los investigadores del Conicet apunta a tratar de mejorar el abordaje médico del glioblastoma, que afecta a cinco de cada cien mil adultos por año a nivel mundial. Podría ser el puntapié inicial para el desarrollo de una nueva terapéutica.
Identificaron un mecanismo que podría mejorar el efecto de la quimioterapia
